Marcas y anunciantes apuestan por la publicidad irreal creada con la IA

Por Fabiana Seara | Marketingdirecto.com –

La renderización en 3D y la inteligencia artificial son tecnologías que acaparan miradas en el mundo de la publicidad. Estas creaciones que retan el sentido de la vista de los espectadores se convierten en populares videos de las redes sociales, como es el caso de una reciente acción de Jacquemus, donde los seguidores de la marca francesa viralizaron un video protagonizado por bolsos gigantes que recorren la ciudad de París.

Este tipo de videos tienen una cosa en común, no son acciones reales, sino que son creaciones derivadas de tecnologías como la inteligencia artificial. Acciones que como señala The Drum están «simultáneamente en todas partes y en ningún lado». De esta forma, los anunciantes apuestan cada vez más por este tipo de acciones ficticias, creadas para existir en la red y no en el mundo físico.

La inteligencia artificial está transformando la industria publicitaria en diferentes ámbitos, desde la creación de nuevos contenidos creativos, la optimización de campañas y más. De esta forma, la IA se posiciona como una oportunidad clave dentro del mundo del marketing y la publicidad, permitiendo explorar ideas que serían difíciles de desarrollar físicamente.

«Esta publicidad no existe», acciones digitales que cautivan a la audiencia

Como señalan desde The Drum, parece que en el panorama publicitario actual las acciones de exterior están diseñadas con el objetivo de hacerse virales. Esta tendencia, sumada al auge de los contenidos creados con la ayuda de la IA, tiene como consecuencia que las líneas entre la realidad y la ficción en la publicidad sean más borrosas que nunca.

¿Significa que nos encontramos ante una nueva era de la publicidad simulada? En palabras del diseñador Andrés Reisinger, director creativo mejor conocido gracias a sus acciones de exterior simuladas, el término «realidad» ya no tiene relevancia.

El profesional describe su estudio creativo como «inclasificable», logrando hacer que lo imaginario sea tangible. «Soy un artista digital y un diseñador», indica Reisinger a The Drum, «yo genero obras artísticas e instalaciones que se mueven entre el mundo físico y digital. Estoy interesado en definir lo que yo creo que será el futuro de las experiencias», concluye.

Reisinger añade que todo aquello que es parte de la experiencia humana es real, y plantea si de verdad importa que este tipo de acciones no existan en el mundo real, pues aun cuando no existen en el mundo físico, logran cumplir el principal objetivo de la publicidad: impactar en la audiencia.

Estas nuevas oportunidades tienen un lado positivo, como lo es la capacidad para poner a prueba los límites de la creatividad para los anunciantes, pero también pueden generar información errónea y confusión. «Es crucial lograr un equilibrio, asegurando que la creatividad no comprometa la transparencia y la honestidad», concluye el creativo.